Un equipo arqueológico checo-eslovaco descubrió una ciudad maya de casi 3.000 años de antigüedad en el norte de Guatemala, según reveló el martes un comunicado de prensa de la Fundación Neuron, que apoyó financieramente la expedición.

Llamada Yax Balam, que significa Primer Jaguar, esta ciudad se ha erigido como un descubrimiento fundamental que arroja luz sobre un asentamiento maya hasta ahora desconocido, o mejor dicho, una serie de centros urbanos.

Se cree que este centro urbano recién descubierto, enclavado en la densa jungla, es el más antiguo de la región y, al mismo tiempo, el asentamiento más grande aún por descubrir en la región noreste de Petén. Su descubrimiento permitirá a los investigadores explorar fases cruciales de la historia maya.

La excavación en Guatemala arrojó un tesoro de artefactos, incluidos palacios, estatuas, restos rituales y observatorios astronómicos de inmensa importancia científica.

El profesor Milan Kováč explica: “La ciudad es una de las primeras ciudades-estado mayas, como indica 'Yax', que significa el comienzo. En cuanto al jaguar, la ubicación central de la ciudad estuvo custodiada por un jaguar vivo durante nuestra exploración, lo que presenta un desafío para mantener una distancia segura”.

En la cultura maya, el jaguar simboliza el poder, está vinculado al inframundo y juega un papel fundamental en su mitología. El trabajo de campo inicial indica que Yax Balam prosperó principalmente durante el período Preclásico Medio y Tardío, del 850 a.C. al 150 d.C., sirviendo como el centro de la región durante aproximadamente un milenio.

Actualmente, los expertos, entre ellos los de la Universidad Técnica Checa, están analizando los resultados. Su objetivo es recrear modelos 3D de la ciudad y presentarlos visualmente al público. «Nuestro objetivo es acercar al público a la vida de una de las civilizaciones más antiguas del mundo a través de la animación 3D», afirmó Šilhán.

Uso de alta tecnología para búsquedas detalladas El equipo utilizó tecnologías avanzadas como IA, redes neuronales y LiDAR (una tecnología láser) para mapear la ciudad y localizar estructuras y artefactos importantes.

LiDAR puede penetrar bajo la superficie y revelar edificios, palacios y zonas urbanas. Luego, las redes neuronales buscaron objetos de interés utilizando algoritmos específicos. Las excavaciones y las investigaciones arqueológicas han confirmado los descubrimientos y ahora los expertos trabajan para reconstruir la vida de la civilización maya.