El retraso ha alimentado los rumores de que Giammattei, un líder impopular acusado por el gobierno de Estados Unidos y otros de retroceder en la democracia, podría estar tratando de mantenerse en el poder porque uno de los candidatos en la segunda vuelta prometió luchar contra la corrupción.

Sin dar detalles, Giammettei denunció una «campaña de desinformación y rumores absolutamente falsos y sesgados». Dijo que les estaba diciendo a los guatemaltecos que respetaría el fin constitucional de su mandato el 14 de enero de 2024.

Dijo que la segunda vuelta debe realizarse en la fecha prevista y que trabajará en la transferencia de poder con quien resulte electo.

La semana pasada, a instancias de la Corte Constitucional, la más alta de Guatemala, los paneles revisaron los conteos de votos distritales que habían sido cuestionados por algunos partidos políticos.

El Tribunal Superior Electoral dijo entonces que la revisión no cambiaba los resultados electorales, que mostraban a la conservadora Sandra Torres y al progresista Bernardo Arévalo como los dos más votados entre los 22 candidatos presidenciales.

Pero el viernes, la presidenta de la Corte Suprema de Justicia -el tribunal designado para conocer de las impugnaciones electorales- emitió una orden de que el proceso de certificación de los resultados no podía avanzar hasta que las autoridades electorales le informaran sobre sus métodos y las inconsistencias encontradas. . .

El lunes, la Corte Suprema de Justicia respaldó la revisión de la semana pasada de los conteos de votos impugnados y rechazó nuevos intentos de algunos partidos políticos de retrasar aún más la certificación de resultados.