2.200 millones de personas en el mundo se ven afectadas por la falta de acceso a agua potable segura.

Sin agua, los aldeanos tienen más problemas de salud, inseguridad económica y falta de oportunidades educativas.

El Club Rotario de Kootenai Valley se compromete a llevar agua a las personas que la necesitan.

Hasta el momento, siete pueblos de Guatemala tienen agua gracias al trabajo que han realizado.

En un viaje reciente a Guatemala, representantes de clubes rotarios se reunieron con varios grupos que están trabajando para llevar agua a su propia gente.

George y Linda Gerard y Eileen Carne de Libby y Sandy Carlson y Lucy Smith del club Kalispell estaban en el viaje.

Visitaron el último proyecto de agua en La Vega. Se cavó un pozo y se construyó una torre de almacenamiento.

Como la mayor parte del trabajo lo hacían las personas que vivían allí, sobraba suficiente dinero para llevar agua a las casas de la gente.

Así, 305 familias podrán abrir un grifo y tener agua corriente en sus casas.

Como muchos de los proyectos involucran pueblos cercanos a los ríos, el acceso al agua es caminando hasta el río, a menudo por un barranco, llevando el agua de regreso a casa.

Tiende a estar contaminado por los muchos lugares por los que pasó antes de llegar al pueblo.

Desafortunadamente, son las niñas de la familia cuyo trabajo es hacer varios viajes al río al día para traer suficiente agua para la familia. Esto significa que no pueden asistir a la escuela. Llevar agua al pueblo no solo es bueno para la salud de la familia, sino que también libera a las niñas para que puedan estudiar y quizás tener una vida mejor.

Además de los proyectos de agua, en esta visita, los rotarios visitaron escuelas donde su ayuda construyó nuevas aulas.

En una escuela, antes de que se llevara a cabo este proyecto, los estudiantes estaban afuera, en la acera, frente a otras clases. Esto dificultaría que los estudiantes se concentraran sin distracciones.

En un pueblo, había una vieja escuela que necesitaba ser reconstruida. Todos los aldeanos contribuyeron con suficiente dinero para reemplazar el techo y los rotarios reconstruyeron las paredes.

El Club Rotario inició estos proyectos en 2008 y ha completado siete proyectos, uno cada dos o tres años. Dado que se necesita mucho tiempo para reunir el dinero, hacer planes y reunir los materiales, este es un logro notable.

Los clubes planean continuar mientras sea necesario, lo que significa mucho tiempo en el futuro.