Después de que un golpe respaldado por la CIA derrocara al gobierno de izquierda de Guatemala en 1954, muchos de sus amigos fueron arrestados y varios asesinados por sus creencias. Se dio cuenta de que el arte era un punto vital de resistencia a la opresión y que analizar la literatura a través de su contexto político no era solo una elección metodológica sino un imperativo ético.
En su último libro, “Cruel Modernidad” (2013), sobre el uso político de la crueldad por parte de los gobiernos autoritarios latinoamericanos, escribió que su estancia en Guatemala fue “una experiencia que dejaría huellas en todo lo que escribí”.
Jean Swindells nació el 31 de marzo de 1924 en Dukinfield, una ciudad al este de Manchester, Inglaterra. Su padre, William Swindells, era panadero y su madre, Ella (Newton) Swindells, era ama de casa.
Junto con su hijo, le sobrevive una hermana, Pauline Swindells.
Jean estudió historia del arte en la Universidad de Manchester, obteniendo una licenciatura en 1944 y una maestría en 1946. Al graduarse, recibió una beca de viaje para investigar el arte en toda Europa. Eventualmente se instaló en Florencia, Italia, donde conoció a un artista guatemalteco, Juan Antonio Franco. Se casaron y, en 1953, se mudaron a la ciudad de Guatemala.
Franco era cercano al presidente izquierdista del país, Jacobo Árbenz, lo que lo convirtió en un objetivo después del golpe. Los Franco huyeron a la Ciudad de México, donde ella trabajó como mecanógrafa, maestra y actriz.
Los Frank se divorciaron más tarde y, después de una breve estadía en Jamaica, ella y su hijo regresaron a Inglaterra. Comenzó a tomar clases nocturnas de literatura en español, pero descubrió que casi ningún académico británico estaba interesado en estudiar obras de América Latina, como las que había encontrado en Guatemala.