Muere en Extremadura una mujer de 47 años que no tenía patologías previas, ocho días después de la prueba positiva para SARS-CoV-2. El caso ya ha sido denunciado por los familiares de la víctima a través de una carta dirigida a la administración autonómica, también publicada en redes sociales y en la que explican que el Servicio Extremadura de Salud se negó, pese a una gran insistencia. de la familia y la rapidez con la que avanzó la infección en la mujer, para brindarle atención médica presencial, dándole la única opción de consultar solo por teléfono.
En la denuncia por falta de asistencia médica, la nuera de la fallecida dice que sus llamadas telefónicas y sus insistentes llamadas de ayuda han sido ignoradasEs por eso que ahora exige que su servicio de salud local asuma la responsabilidad de una muerte que, según las declaraciones de la indignada, podría haberse evitado. En la carta se describe cómo la víctima comenzó a asfixiarse y malestar severo desde el 11 de octubre y que, cuando se realizaron las pruebas, se encontró que efectivamente estaba infectada con coronavirus, lo cual no fue suficiente para su suministro. . atención médica urgente.
Después de que le diagnosticaron a la mujer COVID-19, sus familiares llamaron tanto al 112 de Extremadura como al mismo puesto de salud de su ciudad, donde Explicaron que estaban muy saturados, por lo que no podían brindar asistencia presencial y que solo consultarían por teléfono. Tras esta consulta, la mujer siguió empeorando con un rápido aumento de la temperatura corporal que llegó a los 39 grados y con dificultad para respirar.
El estado de la mujer siguió deteriorándose cuando, además del cansancio y la desorientación, comenzó a tener convulsiones, por lo que sus familiares, muy preocupados, llamaron nuevamente a la clínica de salud, donde no solo volvieron a negar su atención. cara a cara, pero Le recetaron ansiolíticos, asegurándose de que lo que estaba experimentando fuera un ataque de nervios. Finalmente, y contrariamente a lo que le comunicaron telefónicamente a la familia, la trasladaron rápidamente al Hospital Tierra de Barros de Almendralejo, pero lamentablemente ya era demasiado tarde y falleció ese día. Después del dolor por la pérdida, los miembros de la familia ahora solo esperan que se haga justicia.
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