Salvadoreños protestado en las calles el viernes contra la adopción de Bitcoin como moneda oficial, poniéndola a la par con el dólar estadounidense.

Los trabajadores, veteranos y jubilados expresaron sus preocupaciones sobre el uso de la criptomoneda, especialmente si se usaba para pagar pensiones y asistencia social en lugar del dólar estadounidense.

Los legisladores de El Salvador votaron a favor de adoptar Bitcoin como moneda legal en junio, y la ley entrará en vigencia el 7 de septiembre.

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, elogió la adopción de Bitcoin como una forma de facilitar el pago de remesas de personas que viven en el extranjero.

Sin embargo, el uso de la criptomoneda como moneda ha sido criticado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) por su volatilidad y falta de relación con la economía real.

Stanley Quinteros, miembro del sindicato de trabajadores de la Corte Suprema, dijo que estaban preocupados por la drástica fluctuación de la moneda, cuyo valor cambia incontrolablemente de un segundo a otro.

Los países vecinos de El Salvador están esperando que la adopción de Bitcoin como moneda legal paralela reduzca el costo de las remesas, una importante fuente de ingresos para millones.

Dante Mossi, presidente ejecutivo del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), identificó a Guatemala, Honduras y El Salvador como los países que más se beneficiarían si la adopción de Bitcoin redujera el costo de envío de remesas.

Agregó que si le va bien a El Salvador, es probable que otros países también busquen su adopción.

Mossi calificó el plan como una «experiencia fuera de este mundo» para aumentar la inclusión financiera en una región donde las personas no tienen cuentas bancarias o tarjetas de crédito y dependen de las remesas de familiares que viven en Estados Unidos.

La asistencia técnica del BCIE a El Salvador en la implementación de la criptomoneda es una importante demostración de apoyo luego de que el Banco Mundial se negara a ayudar debido a desventajas ambientales y de transparencia.