Las sanciones estadounidenses apuntan a un miembro del Congreso de Guatemala y a un exjefe de gabinete presidencial por presunta corrupción.

Estados Unidos impuso el lunes sanciones a un miembro del Congreso guatemalteco y a un exjefe de gabinete presidencial en el país por presunta corrupción, mientras Washington presiona a varios gobiernos centroamericanos para que tomen medidas enérgicas contra la corrupción.

La medida se anunció horas antes de que la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, se reuniera con el presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, para discutir el aumento de la migración centroamericana que ha llevado a una crisis en la frontera entre Estados Unidos y México.

En un comunicado, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos dijo que había incluido en la lista negra a Felipe Alejos Lorenzana, delegado electo al Congreso de Guatemala, y a Gustavo Adolfo Alejos Cambara, quien fue jefe de gabinete del ex presidente Álvaro Colom.

“Estas sanciones apoyan los esfuerzos del pueblo de Guatemala para poner fin al flagelo de la corrupción, como parte del compromiso del gobierno de Estados Unidos de apoyar mejoras en la gobernanza en Guatemala”, dijo el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en una declaración separada.

Un alto funcionario estadounidense dijo la semana pasada que la administración del presidente estadounidense Joe Biden está considerando crear un grupo de trabajo de funcionarios de los Departamentos de Justicia y de Estado de Estados Unidos y otras agencias para ayudar a los fiscales locales a combatir la corrupción en Guatemala, El Salvador y Honduras.

Ricardo Zúñiga, enviado especial de Estados Unidos a los tres países centroamericanos, también dijo a los periodistas que el gobierno estadounidense tiene autoridad del Congreso estadounidense para elaborar listas de funcionarios de la región involucrados en corrupción, revocarles visas de viaje e imponerles sanciones financieras. .

Los legisladores guatemaltecos recientemente se negaron a tomar juramento a una jueza anticorrupción, la presidenta del Tribunal Constitucional, Gloria Porras, a quien los funcionarios estadounidenses consideraban fundamental en la lucha del país contra la corrupción.

La medida del lunes, que según Washington se tomó en coordinación con el Reino Unido, congela cualquier activo estadounidense de aquellos que figuran en la lista negra y, en general, impide a los estadounidenses comerciar con ellos.

Blinken dijo que Gustavo Adolfo Alejos Cambara y Felipe Alejos Lorenzana “buscaron interferir en el proceso de selección judicial para el nombramiento de magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y de la Corte de Apelaciones de Guatemala”.

Dijo que los dos intentaron influir en el proceso de selección de magistrados de ambos tribunales y obtener decisiones judiciales que protegieran a Alejos Cambara y a los jueces de la CSJ de casos de corrupción.