La viña chilena Cono Sur mostró cómo ha reducido considerablemente su huella de carbono desde que mide sus emisiones y compensa las generadas por otros.
La marca de vinos, conocida por sus credenciales ecológicas, empezó midiendo su huella de carbono para cuantificar el impacto de su actividad en el cambio climático antes de detectar las acciones que contribuyeron al aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Según la bodega, contar con esta medida te permite gestionar fácilmente tus acciones para reducir tu huella de carbono, logrando además un uso más eficiente de los recursos.
Las emisiones, que fueron registradas por Vinícola Cono Sur, son verificadas por un tercero acreditado y su última medición correspondió a la Société Générale de Surveillance (SGS), bajo el protocolo de Evaluación de la Huella de Carbono, de Carboneutral.
Hablando de los pasos que ha ido dando en su viaje carbono neutral, la viña destacó cómo trabaja cada año para reducir su huella de carbono y explicó que compensa el 97,8% de las emisiones generadas.
La temporada pasada, Cone Sur compensó 11.411 toneladas de CO2 a través de dos proyectos: ‘Cartera de energía eólica Cuel’ con sede en Chile y ‘Cartera de energía eólica con sede en Guatemala’.
Algunas de las acciones desarrolladas por la bodega incluyen: Reducción en el volumen de combustible utilizado en los viñedos y bodega; Sustitución de maquinaria agrícola; Comprar menos maquinaria HP para usarla en trabajos menos pesados.
Antonia Feres Hoppe, Senior Brand Manager de Cono Sur, dijo: “Como medida para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, cambiamos nuestras carretillas elevadoras de gas licuado de petróleo por carretillas eléctricas. Como resultado, se aprecia una reducción del consumo del 42,3%, esperándose una caída del 90% en el corto plazo”.
Feres Hoppe agregó: “El uso de energía limpia y la reducción de nuestro impacto ambiental siempre han sido el núcleo de la filosofía de Cono Sur Winery. Con el objetivo de reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero y nuestros costos de electricidad en algunas de nuestras ubicaciones, hemos iniciado una evaluación de los requisitos técnicos y la viabilidad de implementar paneles solares en nuestras propiedades”.
En los últimos años, Cono Sur ha implementado paneles solares en diversas localidades a partir de 2017. A la fecha cuenta con cinco instalaciones fotovoltaicas ubicadas en sus predios de El Encanto (Aconcagua), Campo Lindo (Leyda), La Espuela (Maule), Las Lomas y Santa Elisa (Colchagua).
Feres Hoppe también reveló cómo, durante la cosecha 2022, “entró en funcionamiento la planta fotovoltaica instalada en el techo de la bodega, con una potencia instalada de 600 kW” e insinuó que “también está en marcha la construcción de una nueva planta en Viña Mulchén” este año.
Teniendo en cuenta la serie de cambios realizados para mejorar la eficiencia y ser carbono neutral, Cone Sur registró una mejora en la eficiencia del 38%, lo que implica un menor consumo de energía eléctrica y menores emisiones de gases de efecto invernadero.
Además de reutilizar el agua de riego, Cono Sur también redujo los vuelos ejecutivos y redujo progresivamente el peso de las botellas, lo que se tradujo en una reducción del número de copas por litro de vino y del peso transportado.
Viña Cono Sur también puede dar fe de que compensa las emisiones generadas por el transporte (terrestre y acuático) de los productos Cone Sur e Isla Negra mediante la adquisición de bonos de carbono para proyectos de reducción de gases de efecto invernadero, lo cual es validado por la empresa Natural Capital Partners, que emite la certificación CarbonNeutral Delivery.
Durante el último período medido, de junio de 2021 a mayo de 2022, las emisiones de Cone Sur fueron de 11.671 Ton CO2, de las cuales el 97,8% fueron compensadas.
Además, Viña Cono Sur participa en la iniciativa Science Based Target (SBT), que establece que los objetivos basados en la ciencia proporcionan un camino claramente definido para que las empresas reduzcan sus emisiones de gases de efecto invernadero.
La iniciativa ayuda a prevenir los peores impactos del cambio climático y salvaguardar el desarrollo futuro, pero ahora el Cono Sur tiene un nuevo objetivo: tener cero emisiones para 2050, según los criterios SBT (máximo 1,5 °C) .