El Directorio Ejecutivo del Banco Mundial aprobó hoy un préstamo para políticas de desarrollo (DPL) de $ 500 millones para apoyar los esfuerzos de Guatemala para mitigar los impactos de la pandemia COVID-19 en el capital humano de los guatemaltecos pobres y vulnerables, para establecer las bases para una recuperación sostenible, promover la transparencia en el sector público y mejorar la gestión de ingresos.

Para fines de 2020, la pandemia habrá terminado con tres décadas de crecimiento económico ininterrumpido en Guatemala, exacerbando desafíos de larga data, como los altos niveles de pobreza y retraso en el crecimiento, baja acumulación de capital humano y disparidades de género sustanciales. Si bien ya lidia con los impactos negativos de la pandemia, en noviembre el país también fue azotado por los huracanes Eta e Iota, que provocaron graves inundaciones y deslizamientos de tierra que afectaron a más de 1,5 millones de personas.

“El esfuerzo conjunto con el Banco Mundial nos permitirá continuar con la estrategia de contención de COVID-19, apoyando a las poblaciones más vulnerables a través de programas sociales efectivos y transparentes. Este es el primer paso para entrar en una fase de recuperación económica y social. Nuestra prioridad es seguir buscando las mejores estructuras para las operaciones crediticias ”, dijo Álvaro González Ricci, Ministro de Finanzas Públicas de Guatemala.

Específicamente, el DPL apoyará los esfuerzos continuos del gobierno para:

• expandir las redes de seguridad, incluida la extensión del programa de reemplazo de salarios a los trabajadores con licencia formal en el sector privado y la expansión de la cobertura de los programas de transferencia de efectivo del 5 al 10 por ciento de las familias (de 166,000 familias en 2019 a 330,000 en 2022) ;
• ampliar el acceso a los servicios de salud para todos los estudiantes matriculados en las escuelas públicas preprimarias y primarias y proporcionar comidas escolares en casa mientras las escuelas están cerradas, así como raciones de alimentos para familias vulnerables;
• adoptar medidas de detección integrales para prevenir el aumento de la desnutrición y la inseguridad alimentaria de 50.000 niños en situación de riesgo; y
• proporcionar liquidez temporal a través del financiamiento de capital de trabajo a al menos 4.500 micro, pequeñas y medianas empresas, incluidas 2.000 mujeres.

El DPL también apoyará medidas en el Plan de Recuperación Económica del gobierno para: i) expandir la accesibilidad, eficiencia y seguridad de los servicios financieros digitales; ii) incrementar el comercio exterior; iii) aumentar el acceso a los instrumentos financieros, incluidas las estructuras legales para el arrendamiento y la insolvencia; y iv) aumentar la competitividad, el acceso a los mercados y la sostenibilidad del sector ganadero. Otras medidas apoyadas se centrarán en aumentar la transparencia en la gestión de los recursos públicos y la rápida recuperación de la recaudación de ingresos en 2021.

“La respuesta de Guatemala a la crisis fue rápida e integral, amortiguando el impacto en los ingresos, la nutrición y el empleo de grandes grupos vulnerables de la población. El Banco Mundial está comprometido a ayudar a Guatemala y su gente a permanecer en el camino de una visión de desarrollo a largo plazo y reconstruir mejor para una reducción efectiva de la pobreza y un crecimiento sostenible e inclusivo ”, dijo Marco Scuriatti, Representante Residente del Banco Mundial. en Guatemala.

El préstamo para políticas de desarrollo de $ 500 millones en respuesta a la crisis y la recuperación en Guatemala tiene un vencimiento final de 13 años, incluido un período de gracia de 3 años.

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